domingo, 3 de marzo de 2024

SAN RASTREO

 


SAN RASTREO

 

A todos se nos ha quedado marcado en nuestras coronarias algo de la pasada pandemia. Recientemente os hablé de San Follón, pero otro día bien marcado también fue el 29 de febrero.

Este día de ampliación del año bisiesto jamás será olvidado, pues también fue dotado de una alta carga de estrés y trabajo. Supuso no parar el día previo con incidencias y notificaciones, y con el primer caos desde el punto de vista de la Salud Pública, pues nos debimos inventar lo que ahora se conoce como rastreo, pero sin tener nada sistematizado, organizado ni experimentado.

Nuestra epidemióloga del Distrito estaba además de guardia provincial, con lo que la alerta que nos dieron con la llegada desde Italia de un colegio de una población de nuestro Distrito con niños con posible clínica viral a la que se debía llamar por teléfono para conocer su estado e indicar realizar valoraciones de forma urgente. Se debía descartar que nos llegaran casos de riesgo de estar afectados por el mal que parecía se extendía desde China.

Ni os cuento la que le entró a la pobre epidemióloga, y por ende, a mí también…

Así que nos “engargolamos” y nos lanzamos a un fifty-fifty con el listado de los niños y profesores que habían aterrizado horas antes. El listado daba miedo por su cuantía, pero no nos quedaba más remedio.

Llamar a tantas familias para preguntar el estado de su hijo sin desencadenar crisis de histeria ni colapsar además un centro rural con un único equipo de guardia, era algo muy complicado. Las preguntas y situaciones fueron de lo más variopintas que se pueda pensar uno.

Con todo ello, no fueron pocas las familias que solicitaron ser valoradas a lo largo de todo el día 29. La presión asistencial se disparó ese día y la sobrecarga del equipo fue más que evidente, pues no solo fueron los directamente afectados, sino que también algunos que “disfrutaron de los inicios de la histeria colectiva viral”.

Empezaba ya los pródromos del cataclismo que nos englobó a todos…

En esos momentos sí que comprendí la mar de bien los motivos por los que siempre escuché decir a mi abuela Luisa: huye siempre de los años bisiestos….

 

03/03/2024

PD: Siento la demora. Intenté colgarlo el pasado día 29, pero fue imposible…

sábado, 24 de febrero de 2024

SAN FOLLON

 


Sobra deciros, que todos los días tenemos en el calendario oficial y extraoficial algún tipo de conmemoración. Algunos, son muy peculiares (evito denominaciones para no herir susceptibilidades sensibles en extremo), pero al menos en mi calendario personal, el día 24 de febrero de 2020 fue señalado como SAN FOLLON.

Puede que alguno sea lo suficientemente inteligente como para saber el contexto en el que nos encontrábamos esos días. La visión retrospectiva puede dar estas ventajas, pero los que estábamos en puestos de gran responsabilidad, debíamos tener una especial sensibilidad para oler riesgos antes que nos surgieran. En este caso, al igual que muchos más, no me falló: intuía que algo gordo se estaba fraguando con las historias que nos llegaba de China.

A media mañana de ese día, lo comenté a mi equipo directivo tomando café. No me parecía una cuestión baladí lo que parecía que acontecía en China. La realidad actual en un punto del mundo, con una realidad globalizada, nos puede afectar a todos. Es algo así como el efecto mariposa (“El batir de las alas de una mariposa puede provocar un huracán en otra parte del mundo”)(1). No iba muy descaminado. Algunos me tildaron de catastrofista o con comentarios sobre la forma de ser de la política china, en especial en el mundo científico, y de la sanidad, más si cabe.

La cosa quedó ahí y en la tarde las redes sociales y medios de comunicación hacían algunos comentarios velados sobre lo que acontecía en China. Ya se fraguaba una afectación poblacional de más intensidad que lo que se limitaba a una única población china. Se hablaba de más poblaciones afectadas y malas artes con los sanitarios en las zonas afectadas. La rumorología, parecía que tenía cada vez más visos de verdad que de comentarios con diferente intencionalidad.

Pero la denominación personal de ese día fue acuñada más adelante. Concretamente, el día 29 de febrero de 2020, del que ya hablaremos en su momento, al ser el día de San Rastreo.

No tenía muy claro cual era nuestro futuro, ni la afectación personal que ello podría conllevar. Lo que sí tenía claro era que sobre nuestras cabezas teníamos una tormenta perfecta en forma de gran follón.

No me equivocaba….

Jerez de la Frontera, 24 de febrero de 2024.

BIBLIOGRAFIA

1.       El efecto Mariposa - La Mente es Maravillosa [Internet]. [citado 24 de febrero de 2024]. Disponible en: https://lamenteesmaravillosa.com/el-efecto-mariposa/

miércoles, 10 de enero de 2024

E-AUTOJUSTIFICACION RESPONSABLE SIN PAPELOCRACIA BUROCRÁTICA

 


Buenas tardes a todos.

Querría compartiros una aportación-reflexión que creo debemos de tener en cuenta.

Veo en las recientes comunicaciones de nuestros Colegios y la Organización Médica Colegial lo que se ha denominado "autojustificación de incapacidades temporales". Creo, que mal se denomina a esa intencionalidad que algunos Médicos de Familia llevamos años reclamando y solicitando se nos libere, en cuanto a la sobrecarga burocrática injustificada que ello conlleva en nuestro día a día. 

Pero no solo ahora en plena época viral de gripes, covid y viriasis varias, sino para todo el año y siempre, con problemas puntuales de escasa índole y donde un médico no es preciso para nada por su autolimitación del problema. Hablamos de catarros, migrañas, dismenorreas, traumatismos...y un largo cuadro de patologías banales.

En la experiencia de Reino Unido, Alemania, Suecia o Portugal podemos basarnos, y se debería de llamar de forma llana: AUTOJUSTIFICACION RESPONSABLE. Evitemos de esa forma la mezcla o paralelismo con las bajas o incapacidades laborales donde además de un tratamiento médico reglado, la separación de su puesto de trabajo sí supone una parte de su terapia. 

Hagamos que sea algo responsable de la persona y que ya los políticos le den forma a esta sobrecarga burocrática inviable ahora, y sobre todo para siempre. No solo ahora por la sobrecarga y abusos de las circunstancias actuales. Seamos capaces y capacitados del cambio. 

Pero no solo ahora en el entorno laboral, sino en cualquier otro entorno. Os recuerdo que en la educación y en muchos actos de la sociedad o administrativos (exámenes, cursos de formación, docencia universitaria o no-universitaria, asistencia a citaciones...) tambien se exigen y nos inducen carga administrativa en nuestras consultas de los centros de salud (de forma programada, no programada o no demorable) y servicios de urgencias tanto de Atención Primaria como Hospitalaria.

Mi oferta, aportación o idea es que se cree un formulario ex profeso para ello y que se disponga de varias webs de libre acceso donde poder realizarlo para evitar usos espurios de estas notificaciones. Se podrían realizar en webs de ministerios, las empresas, comunidades autónomas, ayuntamientos, centros oficiales y delegaciones administrativas con un coste muy bajo y además con un uso adecuado de los recursos medioambientales por no usar medio físico alguno. Durante las 24 horas del día se dispondría para notificar a la empresa la incidencia y se registraría en el momento que aconteciera sin tener que sobrecargar a la red sanitaria. Toda notificación se canalizaría por vía mail especialmente, si bien ese formulario también se podría tener en versión impresa desde las propias webs. Tenemos muchos ejemplos en la propia red donde basarnos. Algunos organismos oficiales me consta que ya tienen ese sistema de notificaciones de incidencias sin uso de medio físico alguno como nuestro gran Distrito Bahía de Cádiz La Janda del Servicio Andaluz de Salud.

Induciríamos una auténtica revolución con ello y sería algo muy útil para todos, en especial para médicos y la propia administración pública.

Fomentemos los autocuidados y no menospreciemos la buena intención de la amplia mayoría de la sociedad y los trabajadores. A buen seguro que somos más los responsables que los no-responsables.

Tenemos la gran oportunidad de un cambio de gran calado social y apoyo a nuestra sanidad pública. Las palmas públicas en la pandemia estuvieron bien, pero debemos hacer cambios en apoyo a la Atención Primaria, especialmente.

PRIMERO SIEMPRE PRIMARIA


sábado, 24 de junio de 2023

ACTO JUBILAR OFICIAL DEL DISTRITO BAHIA DE CADIZ LA JANDA

 




En la mañana de hoy he tenido el honor, suerte y gusto de asistir al acto oficial de despedida de los profesionales que se jubilaron en los años 2019 al 2022 en nuestro Distrito. La pandemia fue la causante de tanta demora e imposibilidad de su realización.

Partiendo de mi agradecimiento al actual equipo directivo por su amable invitación y a la Dra. Pulido (directora de mi Centro de Salud donde tengo mi plaza en propiedad en el Servicio Andaluz de Salud) por facilitarme la asistencia, quiero plasmar en estas sencillas palabras, todas las sensaciones que en el acto y posteriormente, me han surgido.

Han sido más de 200 personas las que en esos años se han jubilado, pero solo han podido asistir algo más de la mitad, por diversos motivos.

Tal y como iban siendo nombradas, me surgían sensaciones, sentimientos y no pocos chispazos. A muchos no llegué a conocerlos. A otros de entrada no los recordaba, pero me sonaban sus nombres o rostros, pero ya luego pude acordarme de ellos por activación de algún locus de memoria inactivo en ese momento y luego se pudo activar.

En su inmensa mayoría, tenía gratos recuerdos. En muchos solo recuerdos. En algunos recuerdos no tan gratos.

Era curioso ver muchas circunstancias que con muchos se rodearon. Con algunos he mantenido incluso relaciones profesionales a diferentes niveles, tanto ellos como yo. Algunos estuvieron por encima de mi en la estructura jerárquica del SAS y luego cambiamos de niveles ambos. Algunos han sido profesores y docentes míos, para luego ser yo docentes suyos.

De muchos he aprendido muchísimas cosas desde el punto de vista humano, personal, familiar, y sobre todo profesional. Es más, hoy en día, y tras muchos años, sigo haciendo cosas que ellos me enseñaron, y que recuerdo cuando las tengo que hacer.

Con otros, he guardado sus formas de ser y actuar ante las vicisitudes que el día a día profesional, personal o social nos depare. De otros aprendí lo que no se debe hacer, de ser o de actuar. También los recuerdo.

En definitiva, un raudal de sensaciones, recuerdos e impresiones gratas que me llevé en el zurrón a mi casa y que luego, en la noche, antes de que el sueño me alcanzara, pude de nuevo saborear.

Grande mi Distrito Bahía de Cádiz La Janda, y más sus gentes.

Dios os bendiga.

Nos hace falta a todos….

 

Jerez de la Frontera, 23 de junio de 2023.

 


martes, 9 de agosto de 2022

LA TARA GENÉTICA

 


Siendo de las profesiones peor pagadas y compensadas tras tantas selecciones de entrada y progreso, tras tantos años de formación y de actualización constante, ¿Cómo es posible que haya tanta gente que quiere estudiar medicina (y otras profesiones sanitarias)?.

Esta reflexión ha tardado en salir y ha tenido varias versiones, modificaciones, correcciones y aportaciones. Vamos, que ha sido un parto largo…

Todo parte del análisis de la realidad profesional y laboral de la sanidad (y de la medicina en especial). Intento dar una explicación al origen de lo que llevo detectando desde hace lustros.

Todo nace de la situación de la dificultad para estudiar estas carreras (las que mayor puntuación pide de entrada en la Universidad, en especial medicina) y por el contrario, la situación laboral que arrastramos, que francamente y en general precisa de grandes mejoras; en especial en Atención Primaria. Debe haber una explicación para argumentar que los chavales decidan enfocar su vida a la dedicación en sanidad y no en otras actividades profesionales con mejores condiciones laborales y económicas en mucho menos tiempo que lo que se necesita para poder ejercer la medicina en la sanidad pública; teóricamente, claro.

Creo que todo está basado en la posible existencia en todos los que decidimos que nuestra vida transcurra por los senderos profesionales de la medicina, de una modificación o tara genética que nos hace que nuestra “querencia”. Los patrones por los que nos regimos para decidirnos, son muy parecidos. Mi mujer corrobora este enfoque, pues dice que “todos somos muy raritos”; y no creo que le falte razón, sinceramente.

¿Qué otra explicación puede tener para que una persona decida dedicar su vida a una profesión mal pagada, con horarios y dedicaciones intempestivas (anti-natura se podría incluso decir), con una alta delimitación de entrada en la Universidad, a la que además se le obliga a una especialización a la que se accede tras otra limitación de examen ultra-selectivo y a la que debes dedicar un mínimo de 4 años más tras los 6 de la carrera? Además, tras esos más de 10 años, no tienes estabilidad laboral ninguna y si quieres esa estabilidad en la sanidad pública, debes de superar otro examen de oposición entre los ya especialistas con una cadencia de presentación completamente anárquica en cada uno de los reinos de Taifas de nuestras Comunidades Autónomas. Tantas limitaciones en la formación, capacitación y exigencias no se ven francamente recompensada con una actividad profesional futura, junto con unos emolumentos que compensen esta dedicación durante tantos años.

También, puedes decidirte por la sanidad privada, pero no es precisamente un mundo donde se percibe grandes ingresos, excepto en algunas especialidades muy concretas y en esta última sectorización sanitaria.

Mi razonamiento también se puede basar en que es algo que se puede transmitir de padres a hijos. Todos conocemos familias enteras que se dedican generación tras generación a la medicina en sus múltiples especialidades y puestos de trabajo. He estado en casas donde una gran parte de ellos son médicos y donde los que no lo son, suponen una minoría que son conscientes de ello. Sería una transmisión netamente genética.

Pero también hay explicación para los primeros de una familia que se dedican a la medicina, pues la mutación puntual también existe, y puede que sea incluso el primer caso de una futura transmisión genética.

Si ya nos enfocamos en los fenotipos, creo que la cosa ha ido evolucionando, y las características de los estudiantes y residentes son muy distintas de las nuestras. Aquí ya hay algo más de darwinismo de trasfondo, pues los enfoques de vida y de dedicación profesional son diferentes. En buena parte, muy motivado del franco predominio de la mujer en las Facultades. Ello me plantea la duda si es que la tara genética es más proclive a su manifestación en las féminas, pero no lo tengo muy claro. Más bien pudiera ser darwinismo pues ellas se les ven más aplicadas y estudiosas que a ellos, creo sinceramente.

En definitiva, que no hay más explicación para que nos dediquemos a la medicina y a la sanidad que la existencia de esa tara genética, pues los años previos y dedicación que exige no tienen contraprestaciones profesionales, laborales y ni económicas suficiente, al menos lo que yo veo…

 

Dr. Manuel Mª Ortega Marlasca.

9/8/2022


jueves, 17 de marzo de 2022

EL MINUSVALIDO ERA YO...

 


Ya hacía tiempo que no me dedicaba a mi blog....pero hoy el acontecimiento, merece la pena que lo ponga en negro sobre blanco y lo recuerde cuando deba...

Me dirigí a una persona en un lugar cerrado y distante. Parecía que no me escuchaba, por lo que elevé más mi voz. Se levantó de la silla donde estaba reclinado y se me acercó sin mascarilla.

Empecé mi pregunta con mascarilla como esta pandemia nos obliga, pues además de estar en el exterior yo y guardar distancia, entendí que mi intensidad era la apropiada. Me dijo algo, pero no me le entendí.

Le repetí la pregunta y ya escuché que me dijo que con la mascarilla no se enteraba. Algo que lo dijo perfectamente. Le repetí la pregunta de nuevo más fuerte. A lo que me volvió a decir que con la mascarilla no se enteraba y que era mejor que me la quitara.

Me quedé un poco bloqueado y me la retiré un poco, al principio de mi pregunta, y me la puse a los segundos del inicio de la pregunta. Me dijo ya muy próximo a mi, que con la mascarilla no me entendía. Ahora, ya tan próximo, sí me di cuenta que su forma de hablar era ya más fidedigna de su condición: es sordomudo.

Me quité la mascarilla y ya me pudo entender, guardando de forma superlativa la distancia de seguridad mínima. Tenía que regresar a casa por una cosa que debía entregarle.

A mi vuelta, ya con la mascarilla quitada, pude comunicarme con él perfectamente.

Al final de nuestra corta conversación, le hice una torpe señal del leguaje de signos, que no era lo que intentaba decirle: gracias y perdona. Sonrió y me lo indicó amablemente como se debe hacer.

Me acabo de dar cuenta que, el minusválido era yo...


martes, 12 de octubre de 2021

¡¡¡¡…Y SON YA 25 AÑOS¡¡¡¡

 


Sin saber muy bien ni como, ya han pasado nada más y nada menos que 25 años que nos casamos. ¡¡¡Quién lo diría!!!. Para mí es como si hubieran pasado tan solo unos días…

Tal día como hoy, hicimos realidad lo que años llevábamos deseando. No fue mucho tiempo tramado, pero creo que nos salió bien y que todos lo disfrutamos.

Precisamente la foto que acompaño es del pasado sábado, y nos la hicimos adrede en el mismo lugar donde hace más de 30 años vi aparecer por allí a una cosita chiquitita y mandona con una chaqueta de cuero marrón, dando botazos y taconazos por medio de la Pandilla. Y es que me fijé en ella cabreada…. Manda bemoles la cosa… Pero tenía la intencionalidad de quedármela…y mira por donde hoy cumplimos 25 años casados y más de 30 que vivimos juntos y con objetivos comunes.

No digo que sea fácil la convivencia, y más con uno como yo que a veces soy algo terco y centrado en un objetivo, pero la vida y el día a día te va dando una plasticidad adaptativa de la que antes no te veías dotado. Si a ello le añades la pandemia, te acrecienta la resilencia y la capacidad de amoldarte a lo que la vida te trae.

De todas formas, cuento con la alegría y la suerte de contar con una buena mujer, brillante y abnegada madre, trabajadora persistente, ejemplar hija y compañera perpetua en todos los avatares que la vida nos ha detraído y los que si Dios quiere, nos queda por sortear.

No quiero cansaros y solo desearos que tengáis al menos mejor suerte que la que yo he tenido de haber llegado hasta aquí (creo difícil de superarla…) con esta pedazo de ser humano llamada Ely, la Marquesa del Serrallo, la Porry Chica u oficialmente Isabel.

Dios te bendiga y te deje siempre a mi ladito…

 

Manuel Mª Ortega Marlasca

12 de octubre de 2021